Entre generaciones

Salió de una de esas reuniones de equipo alrededor de la máquina del café que tenemos programadas todos los días. El día a día en la residencia es vertiginoso, como en cualquier casa, vamos. Recibimos visitas, programamos menús, disfrutamos delante del televisor con Neymar y sus últimas maravillas (con permiso de Messi, por supuesto), nos alegramos de las familias que crecen y despedimos a los que se van. Pero a veces, entre tanto quehacer, programamos actividades que ocupan espacios que en una vida normal en una casa normal ya están rellenos de forma natural. Estas ideas no son nada originales, siempre responden a la noción de hogar que tenemos de Masdeu.

Masdeu Hogar es un espacio de encuentro entre generaciones

Alrededor de la máquina de café ocurren las mismas cosas que alrededor de una mesa de cocina en un hogar que en lugar de contar con 40 almas sólo cuenta con 4. Y allí estábamos contando que fulanito dice que caray la juventud como sube, y que si están desmarchados y ya no valoran y tal y cual. Pero en base a qué, nos preguntamos. Algo nos faltaba, un marco de referencia. En este momento llegó el germen de lo que nosotros llamamos nuestro Programa de Encuentros Intergeneracionales, que como Encuentros en la Tercera Fase, se basa en poner en un mismo lugar  los de aquí y  los de allí. Los de aquí somos nosotros, los residentes, los trabajadores, los de Masdeu y los de allí son los jóvenes que nos visitan, que nos cantan sus canciones y nos cuentas sus preocupaciones (que también las tienen y son tanto más apremiantes que las nuestras).

Primera merienda con l’Esplai de Sant Cebrià

Dicho y hecho, el pasado 28 de noviembre, los chicos y chicas de l’Esplai Sant Cebrià d’Horta pasaron una tarde en Masdeu intercambiando vivencias. Merendamos y cantamos canciones, incluso nos ayudaron con alguna de nuestras manualidades. Prueba de ello son unas preciosas mandalas que guardaremos como un tesoro y las enseñaremos a nuestras visitas del domingo como un trofeo. Salieron contentos y nosotros más. Por eso repetiremos. Queremos que Masdeu se rellene de lo que nos falta, del marco de referencia del barrio, de la vida más allá de la nuestra, aunque por la imposibilidad de salir a encontrarla, tengamos que invitarla a merendar a nuestro hogar.